Empezamos en el Salvador, a eso de las tres de la tarde, aunque ya la Paz estará en la calle, la Borriquita inaugurará la Semana Santa descendiendo la archiconocida rampa del Salvador.
Continuaremos en la esquina de las calles Gerona y Doña María Coronel, sobre las cuatro estará pasando la hermandad de la Cena por allí, jugando con los colores del cielo azul, de los naranjos verdes y de las fachadas antiguas y añejas de la calle.
La tarde debe ser radiante y pasear por las calles del centro a esa hora será un placer. Nos marcharemos a continuación a la calle Feria, en su confluencia con Relator por donde, a eso de las cinco y media de la tarde, estará discurriendo la hermandad de la Hiniesta.
Y de la Macarena al Arenal. A Tomás de Ybarra para ver a la hermandad de Jesús Despojado, aprovechando que la bulla se arremolina en el Postigo, sobre las siete y media de la tarde buscará su capilla viniendo de la Catedral.
Cerca, por San Gregorio, regresa la hermandad de la Paz a las ocho de la tarde camino del Porvenir.
Y seguiremos a la sombra de la Giralda, en la esquina de Alemanes con la cuesta del Bacalao, donde a las nueve y media de la noche estará la hermandad de San Roque iniciando su camino de vuelta.
Terminaremos de rodear la catedral para volver al barrio del Arenal. La hermandad de la Estrella sobre las diez y media irá transcurriendo por él de manera triunfal, y hablando de triunfo, en la plaza del mismo nombre es probable que encontremos al palio, ya que esperar la cofradía a pie quieto puede ser un suplicio a éstas alturas del día.
A eso de las once y media de la noche, nos apostaremos en la revirá de Francos con la Cuesta del Rosario para ver a la hermandad de la Amargura, avanzar valiente hacia San Juan de la Palma.
Una vez que pasen los nazarenos de la cruz de Malta y les acompañemos por Cuna, volveremos hacia el Salvador para ver entrar a la hermandad del Amor.
Como da tiempo, aún podemos darnos una caminata para ver a la Estrella por su barrio.
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