Relevo en 2009

Santísimo Cristo de las Almas, martes santo de 2009. La plaza del Cristo de Burgos abarrotada mezclaba el olor a pavilo y cera quemados con el incienso y el aroma a lagrimitas de un bar cercano. Una cámara improvisa un retrato al que le tengo un gran cariño: A mi derecha un gran amigo y costalero, por fín cumpliendo su sueño, del Señor de las Tres Caídas, junto a él otro peón de la morena de la calle Pureza y a mi izquierda otro gran amigo y gran costalero. En resumen, una de esas fotos que se guardan con cariño.