miércoles, 23 de abril de 2008

Un día inolvidable... algo para recordar





Día diecinueve de noviembre de 2005, año jubilar de los santos mártires. Con motivo de esta efemérides la hermandad de la Buena Muerte de Córdoba decide celebrar una procesión extraordinaria con la salida de su titular mariana Nuestra Señora Reina de los Mártires, recorriendo las calles cordobesas desde su iglesia de San Hipólito hasta la Basílica menor de San Pedro, en cuyo sagrario reposan los restos de San Acisclo y Santa Victoria, los Santos Mártires de Córdoba.

Aquello supuso un día inolvidable, algo para recordar. El palio de Esperanza Elena Caro, con música, como no habia salido nunca en su historia. Y el nacimiento de una nueva figura del martillo: Ese chico larguirucho que aparece de negro en la última foto, Enrique Garrido.

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