Hoy es un domingo para disfrutar, un día señalado en rojo en el calendario de la cuaresma sevillana. A falta de una semana para el pregón, que este año declamará un costalero, y de dos para el domingo de Ramos los que disfrutamos con el mundo de la trabajadera y el martillo sabemos que cada año este día es grande.
Temprano, muy temprano la cuadrilla profesional de Santa Marta se cita en las inmediaciones de San Andrés para mudar el paso de salida y, como son los mismos capataces, el misterio de la hermandad de la Amargura realiza en esta misma mañana aunque un poco más tarde su último ensayo-mudá, llevando la parihuela de la calle Butrón a San Juan de la Palma y sacando de su ostracismo anual el canasto encajonado con las figuras secundarias enfundadas en sábanas, los fantasmas.
Espero que salga una mañana de sol, calor, azahar y cervecita, y que sea un preludio perfecto para lo que nos espera en los próximos catorce días.
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